Por: NICOLÁS OLIVARES
Antes del año 2018, la movida del trap chileno estaba dando sus primeros pasos, cultivándose u creciendo de a poco en ambientes de fiestas y en el internet, En el camino que comentaron referentes como Marlon Breeze, Criz Gómez y André Lavoe, entre otros, comenzaron a brotar varios jóvenes exponentes que rápidamente inundaron la res con mixtapes, singles y videos musicales. La escena ya tenía artistas, y el público de forma gradual volteaba la mirada ante un género extranjero, extravagante, una reconversión de un estilo musical como el hip hop que ya había echado raíces en Chile durante más de dos décadas. Estaba todo listo para el despegue de esta movida, pero para la llegada de este auge, era necesario un disco que pudiese romper el molde y dar el salto de calidad.
Finalmente, en agosto de aquel año 2018, aparece S.U.N.O, mixtape con el que Pablo Acevedo, mejor conocido como Pablo Chill-e, cambiaría el panorama del trap nacional para siempre. El nomnre del disco, acrónimo de «Surfeando una nueva ola» no podría estar mejor puesto, ya que, a pesar de su condición de mixtape, el trabajo de Acevedo es un álbum en toda regla, y uno primero-en-su-tipo para el creciente movimiento nacional.
En S.U.N.O, Pablo Chill-e pone en la mesa elementos que son el molde para los trabajos que le han seguido. No solo se vale del relato de ostentación y superación económica, o las referencias sexuales que a menudo son blanco de críticas ante los oyentes ajenos a la movida, sino que se encarga de elevar la narrativa de la periferia y el paisaje poblacional como un estandarte, y lo reivindica. A través de este relato de superación, socarrón, soberbio y burlón, Pablo construye un carácter y carisma como pocos en la industria, y lo imprime en cada track de este disco que suma clásico tras clásico, que no solo destaca por este aspecto, sino que musicalmente, y a nivel de beats y producción, aún ocupa un lugar privilegiado como el mixtape por excelencia del trap chileno.
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